Sergio Marín
[San Luis Hoy]
La encargada del despacho de la Auditoría Superior del Estado (ASE), Rocío Elizabeth Cervantes Salgado, dio a conocer que desde el 30 de junio, el organismo decidió no renovar contrato a 80 personas, de las cuales no tenía conocimiento de dónde laboraban o las actividades que realizaban, y que fueron dados de alta bajo el régimen de honorarios asimilables.
Adicionalmente a esto, la ASE también reiteró que se llevó a cabo el cese definitivo de 13 funcionarios de primer nivel que estaban con la anterior administración y que aún durante días anteriores, algunos estuvieron asistiendo únicamente para concluir con el proceso de entrega recepción de acuerdo a las áreas correspondientes.
Cervantes Salgado había señalado hace una semana que no tendría interés en participar dentro del proceso de selección del titular de la ASE y en esta ocasión reiteró que no ha pensado en esa parte y que se encuentra en este momento concentrada en el trabajo que le fue encomendado respecto de la revisión de los entes auditables, trabajo que sigue en proceso, por lo que dijo desconocer los términos en los que va orientada la convocatoria.
Agregó que el compromiso que existe es sacar los pendientes de trabajo, sobre todo con el rechazo de las cuentas públicas, verificar que los informes estén apegados a la ley, y que cumplan con las normas de auditoría.
“Tenemos también el compromiso de empezar la revisión de 2017 a partir de julio, tenemos que restructurar equipos de trabajo para que las revisiones se hagan conforme al Sistema Nacional de Fiscalización”, concluyó.
Explicó que a la Auditoría le hace falta fortalecer los controles internos que son riesgos inherentes del trabajo de fiscalización, pues los problemas que han ocurrido en la ASE son por falta de control.
