Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
Ningún familiar se hará cargo del viejito que vivía sólo en un cuarto de la calle Reforma, sino que conseguirán que temporalmente se haga cargo de él Fernando León, quien acusó en primera instancia que el abuelito había sido corrido por su arrendataria del lugar en donde antes vivía.
Socorro Páez de la Rosa, quien rentaba un cuarto a Ubaldo Antonio Dolores en la calle Reforma 230 y que fue acusada de haber echado a la calle al abuelo, y que después negó tales señalamientos contra la que le alquilaba su pequeña vivienda, dijo que la sobrina de Ubaldo, de Tancanhuitz, no quiso llevarse al anciano a ese municipio, de donde él es originario.
Temporalmente buscarán que el anciano viva y pernocte en una propiedad que es de la familia de Fernando León, quien fue el primero en advertir que el viejo había sufrido el abuso.
Lo que Socorro Páez busca es deslindarse del asunto porque afirma que ella ayudó cada que pudo al anciano y lo que obtuvo a cambio fue la crítica de muchas personas que la juzgaron sin saber cuál era la real situación del anciano.
