Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
Los niños “emperador” surgen porque los papás ahora tienen la idea errónea de que deben ser amigos de sus hijos y eso provoca permisibilidad y problemas.
Mary Ema Arévalo Moctezuma, psicóloga adscrita al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) explicó que los papás de un menor de edad pueden sostener una relación amigable con sus hijos, sí, pero no ser sus amigos, porque los papás que se equidistan de sus hijos (que se ponen a su mismo nivel), provocan que después los niños sean los que mandan en su casa.
Dijo que es una falta de valores actual, porque los papás suelen ser más jóvenes en la actualidad y, bajo el argumento de que no se debe ser tan severo con el niño, muchos paterfamilias se convierten en aquiescentes del menor (o sea, que se dejan mangonear).
Por eso luego surgen los niños que les gritan a sus papás, les ordenan lo que quieren e incluso castigan físicamente a sus padres, porque creen que son iguales a sus progenitores.
No se trata de ser duro con los niños, pero el menor debe entender que el papá y la mamá es una autoridad que hay que respetar.
“Él tendrá amigos después, pero sus papás no son sus amigos, son las personas que los van a amar, a educar y a formar, pero no a hacer lo que ellos quieren”, puntualizó.
