Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
CIUDAD VALLES. Un grupo de maestras del CENDI (hoy Centro de Atención Infantil) impidieron la entrada de la directora recién reinstalada, María del Carmen Ahumada Lara porque la señalan por “acoso laboral”, desde hace dos años, cuando la Secretaría de Educación de Gobierno del Estado separó a la directiva de su puesto para hacer una investigación sobre este asunto.
Sin embargo, luego de 24 meses de pesquisas, la autoridad laboral de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) decidió devolver el cargo a Ahumada Lara hoy, pero un grupo de inconformes que se había manifestado el 9 de octubre de 2017 volvió a cerrar las puertas del sitio donde se atienden niños de 45 días de nacidos a seis años, y en donde se imparte educación inicial y preescolar para hijos de personal docente.
Cuando la directora estaba en funciones en 2017, había 184 niños.
Algunos padres de familia dijeron que acudirían a la Unidad Regional de Servicios Educativos de la Huasteca Norte para demandar por sus derechos.
Por mientras, personal de cocina daba avena y pan a los menores de edad en la banqueta frontera del plantel.
El conflicto inició cuando la directora demostró con su equipo de maestras y psicólogas que la maestra Lourdes Anahí había golpeado a un niño pequeño.
Durante los dos años de ausencia Ahumada Lara, la directora fue Prudencia Oyarvide.
LAS QUE BLOQUEARON SE DEFIENDEN
Brenda Guadalupe Rodríguez, Carolina Hernández y Mónica Briones, trabajadoras del CENDI acusan a la hermana de la directora que hoy sería restituida al cargo, María Guadalupe Ahumada de maltratar a sus hijos y de haber salido impune de esas agresiones por el simple hecho de que cuando ocurrieron, su consanguínea era la encargada del plantel que está en la colonia Vergel.
Estas acusaciones dicen haberlas interpuesto dentro de la URSEHN y en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) pero los casos de agresión contra infantes se demeritaron o no se les dio seguimiento porque en ese tiempo la directora encubrió a su hermana.
Además de ello acusan a la directora por restituir de acoso laboral y piden la presencia del Gobernador o del Secretario de Educación para resolver el actual conflicto.
No obstante, la hermana de la directora dijo que todos los casos han sido solventados y que no se ha demostrado nada de lo que la han acusado, que, por el contrario, le han causado tales niveles de estrés que ella casi muere por un subidón de presión arterial hace poco tiempo.
