(EFE)
Morelia, Mich.- Autoridades del estado de Michoacán revelaron que ha aumentado a cinco personas muertas y nueve más desaparecidas el saldo que dejó el desbordamiento de un río y una represa en el poblado de Peribán, a causa de una fuerte tormenta del domingo.
El presidente Enrique Peña Nieto ordenó a la Segob coordinarse con el Gobierno de Michoacán para atender la emergencia, aunque soldados del Ejército ya comenzaron con la atención a damnificados.
El gobernador Silvano Aureoles Conejo se ha trasladado con miembros de su gabinete a la zona del desastre, donde coordina las labores de búsqueda de los desaparecidos, entre quienes habría cuatro menores.
La tormenta se registró alrededor de las 17.00 hora local (22.00 GMT) del domingo en Peribán, un municipio dedicado principalmente a la agricultura, desbordando el río Cutio así como una represa.
Las fuertes corrientes de agua arrasaron al menos una decena de viviendas y afectaron a un centenar más, arrastrando vehículos, árboles y personas.
Resultado de las afectaciones en su patrimonio, cerca de 50 personas se encuentran refugiadas en el albergue y, el resto de damnificados buscaron asilo en la casa de algún familiar. Soldados del Ejército mexicano iniciaron la aplicación del Plan DN-III-E, un operativo de rescate y atención a personas afectadas por la contingencia.
Una zona de baja presión con 70 % de potencial para desarrollo ciclónico en 48 horas se localiza al sur de las costas de Michoacán y Guerrero, en el Oceáno Pacífico.
El fenómeno “favorece el potencial de tormentas puntuales intensas en Guerrero y Oaxaca, y tormentas muy fuertes en Michoacán”, señaló el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) en su reporte más reciente.
