(EFE)
Hong Kong.- Decenas de miles de hongkoneses salieron a la calle para pedir más libertadas democráticas el día que se cumple el 20 aniversario de su retorno a China luego de ser colonia británica y horas después de que el presidente chino, Xi Jinping, advirtiera en la ciudad que no tolerará ninguna amenaza contra el poder de Pekín.
Bajo el lema “Un país, dos sistemas: una mentira. Reclamar Hong Kong”, unos 60 mil hongkoneses, según datos de los organizadores, recorrieron los tres kilómetros de la tradicional marcha del 1 de julio, que desde hace dos décadas es el mayor evento anual popular para protestar contra la política del régimen chino en la ciudad sureña.
“No quiero que Hong Kong sea parte de China, eso es lo que siento”, dijo la hongkonesa Chelly Ip al paso de la marcha en la que participaron agrupaciones políticas y estudiantiles, y que en ciertos puntos del recorrido se topaba con concentraciones de pro chinos celebrando los 20 años de reunificación.
“Hoy es el aniversario de la devolución de Hong Kong a China y estamos aquí para celebrarlo”, dijo Liu Bangxu, un chino residente en la ciudad fronteriza de Shenzhen que vino con unos amigos a festejar la onomástica del traspaso.
Pancartas, paraguas amarillos, símbolo de las famosas protestas democráticas de 2014, y proclamas lanzadas por activistas adornaron el recorrido de la marcha que como cada año convoca la agrupación del Frente Civil de Derechos Humanos de Hong Kong.
Los convocantes cifraron e 60 mil el número de asistentes, una cifra inferior a los 100 mil que habían pronosticado.
La marcha empezó dos horas después de que Xi Jinping abandonara la ciudad en su primera visita oficial como presidente, después de dejar un mensaje claro a la ciudadanía de Hong Kong de que ningún acto de subversión o de oposición al sistema establecido para gobernar la excolonia iba a ser tolerado por su Gobierno.
“No queremos ser esclavos de China”, dijo otra hongkonesa molesta con las políticas del régimen comunista chino.