Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
El hecho de que las mujeres trabajen, hace que haya menos presión de agua y de que zonas altas o alejadas se queden sin agua, explicó el director técnico de la DAPAS, Raymundo Cano Tinajero.
Las costumbres causan cambios grandes en la ciudad y perjudican a unos cuántos que están en zonas altas de la ciudad, de acuerdo con el funcionario de la DAPAS, porque, por ejemplo, el consumo de agua, antes, cuando la mujer no salía a trabajar como ahora lo hace, era durante gran parte de la mañana y la tarde.
Sin embargo, ahora las horas de mayor consumo en casi todos los sectores son durante la noche, porque las mujeres son trabajadoras, pero llegan a hacer faenas domésticas de cualquier manera.
Este fenómeno hace que se gaste mucha más cantidad de agua en zonas como El Carmen o Santa Rosa, que aparentemente no están en puntos demasiado altos de la ciudad, pero que tienen tanques de abastecimiento a los que se les demanda mucha agua por la población que se provee de ellos.
Explicó que esta es la razón por la que en algunos sectores, la presión baja en algunos puntos de la mancha urbana y explicó que se han hecho trabajos de limpieza en los cárcamos para incrementar el nivel de extracción de litros del río, que actualmente es de 490 litros por segundo.
