[El Universal]
MONTERREY.- En seis años de exigir a las autoridades e incluso de salir a campo en la búsqueda de sus seres queridos, integrantes de la agrupación Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Nuevo León (Fundenl), que acumula 40 casos, no han conseguido el hallazgo de una sola persona con vida y apenas han encontrado los restos óseos de cuatro de sus familiares, uno de ellos por su propia cuenta.
Sin importar el frío y una pertinaz llovizna, familiares de desaparecidos organizados en Fundenl, realizaron una peregrinación desde el cruce de la calle Washington y Zaragoza hasta el santuario de la Virgen de Guadalupe en la colonia Independencia, para pedir, según el caso, por esposos, padres, hermanos o hijos, de los que no se sabe sobre su suerte y paradero principalmente de 2010 a la fecha.
La tragedia que vive Nuevo León como gran parte del país, de 2006 a la fecha acumula una cifra oficialmente reconocida de más de tres mil desaparecidos, pero según Fundenl, sólo se denuncian tres de cada diez desapariciones por lo que serían más de diez mil víctimas de este delito tan sólo en la entidad.
Lourdes Huerta, integrantes del mencionado colectivo, comentó que son 40 familias organizadas desde hace seis años para exigir a las autoridades la búsqueda de sus seres queridos, y que al paso de los años han tenido que movilizarse para traer especialistas antropólogos y arqueólogos, que capaciten a los peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado, a fin de que realicen un trabajo más efectivo.
Recordó que en marzo de 2017, al acudir a un predio en pleno monte, para colocar una cruz en memoria de las víctimas del crimen organizado, cuyos restos había recuperado la fiscalía, encontraron fragmentos de huesos, obligando a que la fiscalía, trabajara otros cinco meses más, recuperando otros 149 mil restos óseos.
A la peregrinación acudió Patricia Durán, quien desde hace un año busca a su esposo, Javier, quien salió de su casa en la zona de Cumbres al poniente de Monterrey, el ocho de diciembre de 2017 como a las 16:30 horas, sin que desde entonces se conozca su paradero. Solamente su automóvil fue localizado en Santa Catarina, dos días después de su desaparición.
Comentó la señora Patricia que tanto ella como su hija, de 11 años de edad, han vivido un año de mucho dolor y depresión, ante la falta que les hace su esposo, quien se dedicaba a la compra-venta de automóviles.
Lourdes Huerta dirigió un mensaje al presidente Andrés Manuel López Obrador: “queremos decirle algo muy importante, no son 43 (los estudiantes de Ayotzinapa), son 37 mil más 43, a los que buscamos en todo el país. Sabemos que sí está muy enfocado en la búsqueda de los estudiantes, porque desaparecieron juntos, pero aquí también tenemos desaparecidos en común, y todos tienen el mismo derecho y el gobierno la misma obligación de buscarlos a todos”.
