[ El Universal ]
CUAUTITLÁN, Méx. – Una jueza de control decretó legal la detención de Jesús “N” y formuló imputación por el hecho delictuoso de feminicidio en agravio de Valeria, de 12 años de edad. El hombre laboraba en el bar “Continental”, ubicado en la colonia El Mirador, en Melchor Ocampo, cercano al domicilio de la menor, y también habría realizado tocamientos a sus nietas.
En audiencia inicial de formulación de imputación, realizada en juzgados de Cuautitlán, la jueza también decretó prisión preventiva oficiosa, por lo que el detenido permanecerá en el penal de Cuautitlán, y otorgó la duplicidad del término a 144 horas para decidir si lo vincula o no a proceso.
El agente del Ministerio Público mencionó en la audiencia que Jesús “N” estuvo recluido en los penales de Barrientos, en Tlalnepantla, y Chiconautla, Ecatepec, por los delitos de homicidio y violación.
Afirmó que existen datos de prueba que establecen la probable participación del hombre en el homicidio y abuso de Valeria, menor que desapareció el pasado 14 de octubre, cuando fue a la tienda cerca de su domicilio de la colonia El Mirador, poblado de Visitación, Melchor Ocampo, y cuyo cadáver fue localizado al día siguiente en un predio baldío cercano.
Jesús “N” solicitó que le realicen análisis químico de semen, pues “no he hecho ninguna violación”.
La audiencia se realizó en juzgados de Cuautitlán y estuvieron presentes los padres de la menor, Adriana y Jorge Rivera, asistidos por un asesor jurídico de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, de la Fiscalía del Estado de México.
El Ministerio Público leyó entrevistas realizadas a diversas personas sobre los hechos, entre ellas a dos hijos de Jesús “N”, quienes relataron que su padre les llamó por teléfono llorando y les pidió ayuda, pues “mató a la niña Valeria”, quien además habría realizado tocamientos a sus nietas.
Agregó que el homicidio de la menor ocurrió en el predio donde fue localizado el cuerpo, en la colonia El Mirador, donde fueron recabadas diversas evidencias, y testigos vieron salir del lugar a Jesús “N”, al que conocían de vista porque habitaba en la colonia y laboraba en el citado bar.
Mencionó que el hombre sostenía una relación sentimental desde hace tres meses con una mujer, quien relató que la golpeaba.
