Miguel Barragán
[Huasteca Hoy]
El padre de la joven que fue golpeada hasta la rotura de su pierna por su pareja, hace unas semanas clama justicia y reparación del daño. Exige que se proceda contra el violento soldado que tiene a su hija postrada en un hospital.
Antonio Guzmán Melo, un comerciante de 46 años de edad reclama el hecho de que su hija haya estado desde el 18 de septiembre internada, para salir dada de alta y que de nueva cuenta se encuentre encamada en el Hospital General por la golpiza cruel que le propinó su concubino, un soldado de 30 años de edad, de nombre Leonardo, quien está libre y sin deberla, así como un policía estatal que habría estado envuelto en esa agresión.
A su hija, menor de edad, pero quien ya vivía en concubinato con el miembro del 36 Batallón de Infantería, éste le dio tal patiza, que le rompió huesos y ligamentos de la rodilla en las corvas y eso provocó que, un mes después de la agresión y de sólo pasar unos días fuera de casa, haya vuelto al nosocomio del sur de la ciudad, en calidad de delicada.
Antonio Guzmán refirió que la golpiza que le dio a su hija un hombre entrenado y de mucho mayor peso que ella no es una agresión cualquiera “No son unas nalgadas ni unas cachetadas, la rompió y ella no se puede recuperar, mientras que él está libre”.
El 18 de septiembre pasado, este diario informó que un soldado había sido detenido por agredir brutalmente a su concubina, luego de estar en el interior de un motel, acompañados por otra persona, un oficial de la policía estatal que no se identificó y que no fue arrestado. El castrense está bajo proceso en libertad.
