[Agencias]
Ciudad de México. – Susana Alexander está preocupada por la baja taquilla que ha tenido su obra de teatro “Debería haber Obispas”, y también espera volver pronto a la televisión.
“Es una obra que está muy divertida, quizás muchos no saben que es una comedia muy buena. Cuando salgo del teatro escucho a la gente decir que les encantó. Nos ha ido muy mal porque creen que es una falta de respeto la palabra ‘Obispa’. Nos falta mucho apoyo, espero que se ponga mejor la taquilla, yo soy la productora, espero que siga en cartelera. Estamos en el Centro Cultural Veracruzano”.
La actriz presenta en Ciudad de México “Debiera haber obispas”, obra de Rafael Solana que dirige y en la que también interpreta a la protagonista, una mujer cuya vida cambia tras la muerte del sacerdote con el que ha trabajado durante décadas.
Un papel que demuestra que, en el teatro, el paso de los años no es impedimento para que una actriz consiga buenos papeles, a diferencia de lo que ocurre en otros ámbitos como el cinematográfico.
Asegura que si pudiera elegir pasaría las semanas recorriendo el país con sus espectáculos, para estar cerca del público y entregarse a un arte, el teatro, que califica como “el mejor amante”. “El teatro es el mejor amante, recibe a todo el mundo de la edad que sea (…), recibe desde niños a viejitos y le pone a uno en la tumba; la ópera no, el ballet no, pero el teatro sí”, afirma, comentando que hace poco animó a una señora mayor interesada por la interpretación a que tomara clases.
También dijo que no ha tenido ofertas de trabajo para televisión, de la que fue pionera en México, pero espera que algún productor la busque, si no, está dispuesta a ir a tocar puertas a las televisoras.
